Mi linda mañana

A veces me dan ganas de cometer un asesinato colectivo: en un autobús, con traficantes de comida dentro (si, esos que viven de quitarle a otros la oportunidad de comprar la comida al precio justo), mirando por la ventana y viendo como atracan a un estudiante, bajándome en una parada de autobús que es el dormitorio de un o una indigente, llegando a un banco del estado donde las personas son tratadas como animales, y hasta se hacen a la idea que son animales. Sin cultura, sin conciencia, sin ánimos de mi parte por seguir en esta ciudad,