martes, 21 de octubre de 2014

Viernes 17 de octub

este día cayó un palo de agua, pero igual salí a rumbear con una de mis mejores amigas a una disco de ambiente, una vez más, con esperanzas y con objetivos claros que como de costumbre no fueron cumplidos.
Por lo menos esta vez tenia un back up, un apoyo que estaba ahí solo para mi: Daniela. Ella fue la mejor compañera de la noche, yo quería ponerme triste al ver que no podía cuadrar nada pero ella seguía ahí dándome ánimos, diciéndome que me tripeara el momento (frase que ya le tengo arrechera de tanto que me la dicen) me dijo que me olvidara de los hombres y que me relajara, que el momento era mio y de nadie mas. La amé, y esa noche fuimos libres y jóvenes.

Luego al llegar a su casa y acostarnos comencé a sentir esa tristeza torrencial que se desata dentro de mi, pero ella con las palabras indicadas y con lagrimas en sus ojos supo calmarme. De ella aprendí que hay que darse bastante coñazos en la vida y estar con gente que no vale la pena para que cuando por fin tengamos a alguien que vale la pena la sepamos diferenciar y la valoremos. Me dijo que no me diera por vencido, que el problema no era mio ni de los otros, sino de la forma en como estaba viendo la situación.

Otros High lights de la noche fue que daniela se cuadro a una pareja treintona, un tipo y una tipa que nos dieron la cola y nos brindaron cerveza y que terminé bailando tipo diva jajaja (fue divertido)

No hay comentarios:

Publicar un comentario